En mi familia, todos conocemos el secreto de mi madre para hacer albóndigas y congelarlas sin que se peguen. Esta receta es una de nuestras favoritas y nos encanta compartirla con todos nuestros amigos. Aunque hay muchas recetas para hacer albóndigas, esta es la que más nos gusta.
Ingredientes
- 1 kg de carne molida (se puede usar carne de cerdo, de ternera o una mezcla de ambas)
- 1 cebolla grande, finamente picada
- 3 dientes de ajo finamente picados
- 1 huevo
- 2 cucharadas de pan rallado
- 2 cucharadas de perejil fresco picado
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de pimienta negra
- 2 cucharadas de aceite de oliva
Preparación
En un recipiente grande, mezcla la carne molida, la cebolla, el ajo, el huevo, el pan rallado, el perejil, la sal y la pimienta. Mezcla bien con las manos hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados.
Una vez que los ingredientes estén bien mezclados, forma pequeñas albóndigas con las manos. Si deseas, puedes hacerlas más grandes, dependiendo de tu gusto.
Cocción
Calienta el aceite en una sartén a fuego medio-alto. Cuando el aceite esté caliente, agrega las albóndigas y cocínalas durante aproximadamente 10 minutos, hasta que estén bien doradas.
Congelación
Cuando las albóndigas estén listas, retíralas de la sartén y colócalas en una bandeja para hornear. Luego, pon la bandeja en el congelador durante al menos una hora. Esto permitirá que las albóndigas se endurezcan ligeramente y no se peguen entre sí cuando se congelen.
Después de una hora, coloca las albóndigas congeladas en un recipiente hermético o en bolsas de congelación. Esto te ayudará a mantenerlas frescas durante mucho tiempo.
Servicio
Cuando estés listo para servir las albóndigas, saca la cantidad deseada del congelador y déjalas descongelar durante al menos media hora antes de cocinarlas. Una vez descongeladas, puedes cocinarlas como lo harías normalmente.
Espero que esta receta te ayude a disfrutar de las albóndigas de mi madre sin preocuparte de que se peguen entre sí. ¡Disfruta!