Los bastones de polenta son una opción deliciosa para servir como guarnición o picoteo. Son muy sencillos de preparar, ya que sólo se necesitan los ingredientes básicos para hacer la masa, y después simplemente hay que darles forma. Además, pueden servirse como acompañamiento a una comida principal, o como aperitivo para una reunión entre amigos.
Ingredientes
- 200 gramos de harina de maíz
- 1 huevo
- Aceite de oliva
- Sal
- Agua
Preparación
En primer lugar, mezcla la harina de maíz con el huevo, el aceite de oliva y una pizca de sal. A continuación, añade agua hasta obtener una masa homogénea. Si es necesario, añade un poco más de harina para conseguir la consistencia deseada. Deja reposar la masa durante unos 15 minutos.
Una vez reposada, extiende la masa con un rodillo sobre una superficie ligeramente enharinada. Debe quedar con un grosor de alrededor de 0,5 centímetros. Con un cuchillo o una espátula, corta la masa en bastones de aproximadamente 5 centímetros de largo y 1 centímetro de ancho.
Finalmente, fríe los bastones de polenta en abundante aceite de oliva hasta que estén dorados. Una vez listos, sácalos del aceite con una espumadera y colócalos sobre una servilleta de papel para eliminar el exceso de grasa. A continuación, sírvelos calientes como guarnición o aperitivo.
Sugerencias
Acompañamientos
Los bastones de polenta se pueden servir solos, con una salsa de tomate casera, con una ensalada verde o con una salsa de queso. También se pueden acompañar con un poco de jamón cocido o de jamón serrano.
Variaciones
Los bastones de polenta se pueden preparar de muchas formas diferentes. Por ejemplo, se pueden rellenar con queso, con verduras salteadas o con carne picada. También se pueden añadir especias para darles un toque especial. Prueba a combinar distintos sabores para encontrar tu receta favorita.