Los aperitivos son una excelente manera de comenzar una comida. Ya sea para una cena formal o para una reunión informal con amigos y familiares, los aperitivos siempre son bienvenidos. Existen varios tipos de aperitivos que puedes ofrecer a tus invitados.
1. Aperitivos fríos
Los aperitivos fríos son aquellos que se sirven a temperatura ambiente o fría, y no requieren calor para su preparación. Algunos buenos ejemplos son:
- Charcutería: como jamón serrano, chorizo y salchichón.
- Ensaladas: como ensalada de tomate y mozarella, ensalada de espinacas y fresas.
- Canapés: pueden ser de salmón ahumado, queso crema y pepino, o de jamón serrano y tomate rallado.
2. Aperitivos calientes
Los aperitivos calientes son aquellos que requieren calor para su preparación y se sirven calientes. Algunos ejemplos son:
- Croquetas: de jamón, pollo o setas.
- Empanadillas: pueden ser de atún, carne o verduras.
- Pinchos: de pollo, de gambas, o de verduras al grill.
3. Aperitivos dulces
Los aperitivos dulces son aquellos que tienen un sabor dulce y son perfectos para el postre o como un antojo dulce. Echa un vistazo a estos ejemplos:
- Mini tartas: de manzana, limón y fresa.
- Brownies: de chocolate con nueces, de chocolate con caramelo.
- Frutas: cortadas en pedazos y en palillos, pueden incluir kiwi, fresas y uvas.
Conclusión
Los aperitivos son una excelente manera de abrir un buen apetito en tus invitados sin llenarlos demasiado antes de la comida principal. Ya sea que elijas aperitivos fríos, calientes o dulces, siempre hay algo para satisfacer cualquier preferencia. Siempre es una buena idea incluir una variedad de opciones para asegurarse de que todos tus invitados encuentren algo que les guste. Esperamos haberte dado algunas ideas para los próximos eventos que organices.