Costillas guisadas con alcachofas son un plato delicioso que combina la carne suave y tierna de las costillas con el sabor único de las alcachofas. Esta receta es ideal para servir como plato principal en una cena especial. Las costillas se guisan en una salsa de tomate con cebolla, ajo y vino blanco, mientras que las alcachofas se cocinan en una salsa de vinagre y aceite de oliva.
Ingredientes
- 1 kg de costillas de cerdo
- 4 alcachofas
- 2 cebollas
- 2 dientes de ajo
- 1 vaso de vino blanco
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 2 cucharadas de vinagre
- Sal y pimienta
Preparación
Costillas
- Corta las costillas en trozos de unos 4 cm de largo.
- Ponlas en una sartén con un poco de aceite y saltea a fuego medio hasta que estén doradas.
- Pica las cebollas y los ajos y añádelos a la sartén. Rehoga durante unos minutos.
- Agrega el vino blanco y deja cocinar a fuego lento durante unos 15 minutos.
- Añade un poco de agua si la salsa se evapora demasiado.
- Salpimienta al gusto y deja cocinar a fuego lento hasta que las costillas estén tiernas.
Alcachofas
- Lava las alcachofas y quítales el exterior duro.
- Corta las alcachofas en cuartos y colócalas en una cazuela con el aceite de oliva y el vinagre.
- Añade un poco de sal y pimienta al gusto.
- Cocina a fuego lento durante unos 20 minutos, hasta que las alcachofas estén tiernas.
Presentación
- En un plato hondo, coloca los trozos de costillas en un lado y los cuartos de alcachofa en el otro.
- Vierte la salsa de costillas y la salsa de alcachofas por encima.
- Sirve caliente.
Estas costillas guisadas con alcachofas son un plato sabroso y saludable. Las costillas y las alcachofas se cocinan con pocos ingredientes para obtener un plato rico en sabor y con una textura única. ¡Un plato perfecto para compartir en una cena con amigos y familiares!