Yemas de convento son un dulce típico de España, originario de la región de Andalucía. Estas delicias tienen un sabor único, que las hace una de las favoritas de los españoles. Se preparan con huevo, azúcar, almendra y limón, lo que les da un sabor y un aroma únicos.
Historia
Las yemas de convento tienen una historia muy interesante. Se dice que el origen de estas delicias es el monasterio de San Clemente de Sevilla. Estas delicias fueron creadas por las monjas para que los invitados al monasterio pudieran disfrutar de algo dulce. La receta original se guarda en secreto, pero se ha transmitido de generación en generación, pasando de monasterio en monasterio.
Cómo se preparan
La preparación de las yemas de convento es muy sencilla y no requiere mucho tiempo. Se comienza por separar las claras de las yemas. Las claras se bate con una cuchara hasta que queden bien montadas. Luego se añaden los ingredientes: azúcar, almendras y limón. Finalmente, se añaden las yemas y se mezclan bien. Esta mezcla se coloca en una fuente de horno y se hornea durante unos minutos hasta que esté bien dorada. Una vez horneada, se sirve caliente.
Ingredientes
- 6 yemas de huevo
- 200 g de azúcar
- 200 g de almendra molida
- 1 cucharada de zumo de limón
Preparación
- Separar las yemas de las claras de los huevos.
- Batir las claras hasta que estén bien montadas.
- Añadir el azúcar, la almendra molida y el zumo de limón.
- Añadir las yemas y mezclar bien.
- Verter la mezcla en una fuente de horno y hornear durante 10 minutos.
- Servir caliente.
Consejos para preparar las yemas de convento
- Es importante batir bien las claras para que queden bien montadas.
- Añadir el azúcar de forma gradual para evitar que se formen grumos.
- Es importante añadir el zumo de limón, ya que le da un sabor único al postre.
- Es importante hornear las yemas durante el tiempo adecuado para que queden bien doradas.